"Hace miles de años, el trabajo que la gente hacía fue dividido en empleos que eran lo mismo cada día, en organizaciones donde las personas eran partes intercambiables. Todas las historias habían sido sangrandas de sus vidas. Asi fue como tuvo que ser; es como consiguesteis una economía productiva. Pero sería fácil ver una voluntad trabajando tras esto: no precisamente una voluntad malvada, sino una voluntad egoísta. La gente que había hecho así el sistema eran celosos, no del dinero y no del poder sino de las historias. Si sus empleados llegaban a casa al final del día con historias interesantes que contar, significaba que algo había ido mal: un apagón, una huelga, un matanza frenética. Los Poderes Fácticos no consentirían que otros formasen parte de sus propias historias a no ser que fuesen historias falsas que hubieran sido prefabricadas para motivarles. Las personas que no podían vivir sin historias habían sido conducidas a los concentos* o a trabajos como el de Yul**. Todos los demás tenían que buscar en algún lugar fuera del trabajo el sentimiento de que eran parte de una historia, que era por lo que suponía que los Sæculares*** estaban tan involucrados en los deportes y en la religión. ¿Cómo si no podrías verte a ti mismo como parte de una aventura? ¿Algo con un inicio, nudo y desenlace en lo que jugases un papel significativo?"
"Thousands of years ago, the work that people did had been broken down into jobs that were the same every day, in organizations where people were interchangable parts. All of the story had been bled out from their lives. That was how it had to be; it was how you got a productive economy. But it would be easy to see a will at work behind this: not exactly an evil will, but a selfish will. The people who'd made ths system thus were jealous, not of money and not of power but of story. If their employees came home at day's end with interesting stories to tell, it meant that something had gone wrong: a blackout, a strike, a spree killing. The Powers That Be would not suffer other to be in stories of their own unless they were fake stories that had been made up to motivate them. People who couldn't live without story had been driven into the concents* or into jobs like Yul's**. All others had to look somewhere outside of work for the feeling of that they were part of a story, which I guessed was why Sæculars*** were so concerned with sports, and with religion. How else could you see yourself as part of an adventure? Something with a beginning, middle and end in which you played a significant part?"
(*) Concento/Concent: Lugar de reclusión voluntaria aislado del mundo exterior, similar a un monasterio, cuyos habitantes, bajo estrictas normas de austeridad y relación con el exterior, viven dedicados al estudio y desarrollo de las diversas artes y ciencias.
(**) Yul trabaja como guía de montaña.
(***) Sæculares/Sæcular: toda persona que no habita en un concento ni está sujeta a su disciplina.
Imagen: Analemma, V. Rumyantsev.
Un poco triste, no?
ResponderEliminarRealmente somos asi?
Tenemos que ser protagonistas de algo para seguir adelante?
Cambia de lectura, niño!!!!!!!!!!
(Me parece que no puede ser bueno pensar tanto...
Besinos.
Cambiar de lectura? No. Hace tiempo que decidí que prefería la tristeza del sabio a la felicidad del ignorante. Y sigo buscándola. . . Tal vez esa sea mi historia. . .
ResponderEliminarQué bueno!, no sé igual me tengo que leer ese libro.
ResponderEliminarA lo mejor lo triste, es no ser capaz de tener nuestra historia, y lo bueno es conseguir tenerla a pesar de la vida que llevamos no?
Y tú dejate de tristezas sabias! de vez en cuando está bien ser tonto y feliz! Hace tiempo que decidí que las dos cosas son buenas y sigo pensándolo... Esa es mi historia.
Ser tonto y feliz. . . Vale, pero con un matiz: mejor hacer el tonto y ser feliz :)
ResponderEliminarY mientras que esperas a traduzcan Anathem, puedes empezar por el que le regalé a Marcos por Navidad, Snow Crash, que es una de las primeras novelas de Stephenson.
Bueno, acepto el matiz. Y sí, ya lo tenía en mi lista de siguientes libros que leer. Un beso.
ResponderEliminar:)
ResponderEliminarY la próxima vez que vaya te dejo Criptonomicón, que es más mejor.
Beso :*
Lo triste no es ser protagonistas, está claro que todos somos protagonistas de nuestra vida.
ResponderEliminarLo triste es tener que ir de protagonistas o querer ser siempre el protagonista de cualquier historia.
A veces, casi siempre, los papeles secundarios son mucho mas interesantes.
La función se ve mejor desde la platea.
(Parece que no me habia explicado bien).
Y tambien, algunas veces, hay cosas que mejor no saber.
Muak!!
Señora, creo que ha entendido usted el texto de forma un tanto diferente a los demás, y ahora está estirandome la metáfora en una dirección diferente a la que creo que apunta Stephenson. Me explico, no se trata de ser protagonistas (palabra que Stephenson no usa en el texto), sino de vivir historias; y uso la palabra historias en el mismo sentido que Stephenson, que la define por contraposición a rutina y ocio prefabricado. Es decir, que no se trata de ser protagonistas (con las connotaciones negativas que intuyo asocia usted a la palabra), sino partes activas, creativas, en y de nuestras propias vidas en vez de meras piezas intercambiables en la maquinaria global. 'Tamos?
ResponderEliminarTamos.
ResponderEliminar:)
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