martes, 31 de julio de 2007

Resumen semanal... O algo...

Otra semana que se me ha pasado sin escribiros nada... Mecagüen!!!

Han estado Chichi y Pun de visita, de martes a sábado, y ha sido un no parar. El tiempo que no me pasaba currando, estaba con ellas, aprovechando los ratitos de sol de este medio verano, paseando por la ciudad, viéndola cambiar de color con el cielo, descubriendo antros nuevos y enseñadoles viejos conocidos. Han descubierto la Tuborg y hemos comido como gorrinos, no perdonamos cenorra ni una noche. Espero que hayáis tenido un buen viaje de vuelta, que no fuese mucho jaleo lo de Madrid y que os queden ganas de repertir otra semana de trotamundos. Muchas gracias por los regalos, todos: la camiseta, el llavero, el queso.

Entre las dos señoritas que se fueron el sábado y el puñando de amigos que han hecho las maletas de vuelta a España, este ha sido un fin de semana de despedidas: Jordi, Sergi, Cristina, Marta... Eran los últimos que quedaban de esta remesa, Albert y Vassos ya se habían ido hacía unas semanas. Así que, qué mejor disculpa para juntarnos todos en mi casa y hacer otra cena en condiciones, pasarnos la noche de juerga y darnos un último abrazo con el mejor sabor de boca posible. Volveremos a vernos, nenos. Aquí, en Holanda, Barna, Atenas o donde sea... Un abrazo. Cuidaros.

Unos se han ido y otros han llegado. Zoltan, el hungaro que se escarajonó el codo, y Jo, una estadounidense con la que es imposible estar serio; dos nuevos compañeros de trabajo y de vida nocturna. Entre los tres nos estamos encargando de que al fondo del pasillo siempre haya música, ruido y carcajadas. Además, a finales de Agosto, llegará Erkuden, una navarra que trabajará en el mismo grupo que estaba Jordi. Y más que vendrán, y los que están aquí de forma semipermanente, como un servidor: Helle y Matteo, su novio italiano y ferrarista, para darle emoción a los fines de semana que hay Gran Premio; Geiri, el islandés chifaldo; Giorgos, Gorka, Morten...

En cuanto al trabajo, depués de unos meses pegándome con los rayos X, el metodo de Rietveld y la madre que los parió, parece que las cosas empiezan a dar fruto. Esta semana tengo que comprobar un par de cosillas más y, si todo va bien, tenemos artículo a la vista. Además, el 15 de agosto nos vamos a Colonia a un par de conferencias, hasta el 24; no todo será escuchar chapas... Habrá que hacer algo de turismo, diurno y nocturno... Y el 27, de regalo de cumpleaños, empiezo a dar clases del análisis matemático. A ver que me invento...

P.S.- Creo que desde hace una temporada a esto le da por escupir ventanitas con publicidad a diestro y siniestro. Raro, muy raro, porque no debería, tengo desactivada la opción de forrarme dando la chapa a los colegas con publicidad chorras. Miraré a ver si hay manera de quitarla. Mientras, disculpen vuesas mercedes las molestias.

martes, 24 de julio de 2007

Nürburgring 2007: A río revuelto...

... ganancia del que le hecha más mondongos, del que tiene mejores manos, del único que sonreia tomando el sol en el habitáculo después del chaparrón, tranquilo, impasible, sereno, seguro, confiado, ganador. Ayer Fernando volvio a dejarnos a muchos con la boca abierta, y al resto con ella bien cerrada. Ayer, cuando la lluvia diluyó la superioridad mecánica de sus rivales, cuando las manos, el talento, el instinto depredador contaban más que el monoplaza, Alonso volvio a marcar la diferencia, volvió a regalarnos otro momento historico, épico, mágico. El adelantamiento de Alonso a Massa en la curva 5 (se llama así, no tiene nombre, alguien debería pornerle el del asturiano) pasará a los anales como uno de los mejores de la historia, por espectacular, insólito, arrojado, contundente, porque a cinco vueltas del final valió una victoria.

Los que quieran empañar lo que ocurrió sobre el asfalto, en la pista, cara a cara, como lo hacían las leyendas del pasado, los que quieran distraer nuestra atención centrándola sobre la discusión de patio de colegio vista antes del podio, que recuerden que único que mantuvo la calma, argumentó sin insultos y después tuvo la decencia de pedir perdón en público, fue ese al que tanto gustan de tachar de borde y deslenguado, el bicampeón, dentro y fue de la pista. Que digan lo que quieran, el mejor argumento lo puso Alonso, sobre el asfalto mojado, y quedará grabado para la posteridad sin apelación posible.

Por lo demás, Hamilton, tranquilo que no pasa nada, no siempre ibas a tener la suerte de cara, era difícil, estás aprendiendo... Por cierto, habla con los de la FIA para que nos expliquen eso de la grua, porque o lo dejamos claro pronto o vamos a tener que replantearnos muchas cosas. Ah, sí, y por fa, ya de paso también lo de esas cuatro vueltas de más que se dio el coche de seguridad sin motivo aparente, porque no quiero pensar que fue para darte tiempo a desdoblarte.

Webber, chapeau! Carrera loca y todo lo que quieran; pero para subir al podio había que aguantar, que estar ahí y capear el temporal.

No os distraigo más de lo importante, del espectaculo que hace grande a este deporte. F1, nenos, F1 cortesía del campeón, Fernando Alonso adelantando bajo la lluvia:


P.D.- F1 Managment está obligando a YouTube a eliminar todos los videos de esta carrera haciendo uso de sus derechos de emisión. Espero que este no lo quiten y podáis verlo. Sí, sí, ya sé que los comentarios están en inglés, y es a propósito, porque aunque no entendáis son mas espectaculares que los del calvo, y si los entendéis, estaréis de acuerdo conmigo en que también son mejores.

P.D.- Hoy también os recomiendo el artículo de Hector Campos.

lunes, 23 de julio de 2007

Semana de sol

Me siento culpable por no haberos escrito nada en una semana; la disculpa es simple, ha hecho sol. Después de ocho meses de invierno, el último entre tormentas y chaparrones, ha llegado el verano a Dinamarca. El viento ya no es frío, duermo con la ventana abierta y paseo por las noches en camiseta. El tiempo que no estoy trabajando lo paso en algún parque disfrutando de un buen libro, entrenando con la hierba fresca acariciándome los pies descalzos o tirado sin más bajo el sol. Luego, siempre hay alguien que llama para compartir unas cervezas al resol de cualquier terraza, para deambular por la ciudad en los atardeceres largos de estas latitudes. Termino lléndome a casa porque el estómago me dice que ha pasado la hora de cenar. Aquí se sigue haciendo de noche despacio. Despacio se va posando el cansancio del día y me meto en cama cuando la noche aún es tímida, prometiéndome que mañana pararé un momento a contaros algo...

Así han pasado los días, tranquilos y felices, tomándome muy en serio esto del verano; aquí no dura mucho y este me temo que menos. Hoy ha vuelto a llover, lluvia de verano, sin frío, como en Nürburgring, pero esa es otra historia que os contaré mañana. Estoy cansado de celebrar toda la tarde. Acabo de llegar de compartir mis ya famosas pechugas de pollo a la crema de queso azul, charla, experiencias y vino con seis amigos. Sólo quería ponerle el broche a otro gran día cumpliendo la promesa.

Buenas noches!

O buenos días, por que no creo que nadie vaya a leer esto a estas horas.

sábado, 14 de julio de 2007

Perra España

Hace unas semanas que Paco me pidió un favor. Me pidio que me sentara a escribir esto, o algo parecido, para que todos pudierais leerlo. He tardado más de lo que quería en hacerlo. El primer motivo es la disculpa barata: anduve liado, no encontré el momento, bla bla bla... El segundo es que soy un cabrón; no fue del todo premeditado, pero fue. Cuando un amigo me pide ayuda, acostumbro a sentir la obligación moral de echar una mano, sobre todo cuando él es el primero que da un paso para ayudarse a sí mismo, cuando predica con el ejemplo. Por eso, ahora que Paco ha hecho lo que también me pedía a mí, ya no me quedan más cojones que dejar las disculpas a un lado y seguir su ejemplo.

La historia ocurre en Luanda, o eso es lo que podría paracer a primera vista. Los detalles, si estáis interesados, mejor que os los cuenten sus protagonistas, que al fin y al cabo, a ellos es aquines les toca más los cojones la Situación de los Becarios ICEX en Luanda.

Una vez puestos en antecedentes, si habéis tenido la decencia de echarle un vistazo a los hechos, estoy seguro de que muchos os sentiréis tentados de pensar cosas como: Pues no me dan ninguna pena... Sarna con gusto no pica... Quién les manda meterse en esas historias... No querían aventura y lugares exóticos? Pues ahora que no se quejen... Uy, ya me gustaría a mí tener también todo eso que piden... O la peor de todas: En todos lados cuecen habas y cada uno se jode cuando le toca... Dejame que os diga, antes de que convirtáis la tención de pensar esas cosas en palabras que salgan de vuestra boca, o peor, de que os las creáis, que los motivos por los esas personas decidieron irse a Luanda son cosa suya y sólo suya, no hay ninguna clusula en su contrato que ponga que hacerlo por afán de aventura le de derecho al estado español a darles por el culo. A darles más, quiero decir, porque este tipo de contratos/beca, es otra forma más de contratación ilegal. Sí, sí, ilegal, por mucho que salgan en el BOE y esten aprovadas por el Ministro de turno. Este tipo de becas viven en un limbo al margen de la legislación laboral. Son un invento de las autoridades para conseguir mandar mano de obra barata, en condiciones precarias y con derechos miserables, a cualquier rincón del mundo donde los necesiten. Que sí, que sí, que ya sé que para eso no hace falta irse a Luanda, que es el pan nuestro de cada día en España, y ahí es a donde voy, a que lo peor de todo es que esto nos parezca normal, cotidano, que no nos extrañe, que nos importe una mierda.

Hemos crecido a la sombra de malnacidos y sinvergüenzas. Hemos visto a nuestros padres partirse el lomo para sacar adelante familias que bastante tenían con lo suyo como para preocuparse por las miserias de España. Hemos oído de boca de nuestros abuelos las cazicadas del cura, el alcalde o el hijo de puta con corbata que moviese el percal por aquel entonces. Tirando de este hilo se puede desvelar la historia de España. Por eso, lo que están viviendo estas personas en Luanda, no es una anécdota más, no es una nota de prensa en el telediario de las dos y media. Lo que vemos en Luanda es España, y tal vez, por estar allá lejos, en África, podamos verlo con mejor perspectiva. Es otro pedazo de, como dice Perez-Reverte, ese país de caines hijos de puta, maleados por sinvergüenzas y soplagaitas que duermen tranquilos gracias a las estadísticas. El embajador en Algola lo sabe, sabe que el precio de una vivienda digna en Luada no el precio medio que aparece en las esdísticas. El consejero, coordinador o lo que carajo sea, sabe que no es un lujo tener aire acondicionado en Luanda, sabe que puede suponer la diferencia entre que te pique un mosquito y la palmes de malaria jiñandote en sus muertos, o vuelvas a casa por Navidad. Y lo saben muchos compañeros de trabajo en Luanda.
Y lo saben muchos en España. Y les importa a todos un carajo, porque los papeles oficiales de forman la España virtual, la del telediario, la del mitin preelectoral y el gran hermano parlamentario, ponen lo que les conviene. Saben que esos becarios sólo estarán un año, que son un problema temporal, como los contratos. Mejor dejar que el problema se pudra y para cuando los año que viene se den cuenta, volverá a darles igual. Volverán a irse a su casa satisfechos del deber cumplido, echarle un polvo al conyuje, cenar con sus retoños y jugar el papel progenitor modélico, persona de bien y españolita de pro.

Son esa buena gente, padres modelo y mejores amigos, los mismos que recalifican nuestros parques naturales en terreno edificable, los mismos que se cargan nuestros medios de subsistencia para llenarse los bolsillos, los mismos que desplifarran el dinero de nuestros impuestos en banquetes, inauguraciones y obras públicas inútiles para salir en la foto, los mismos que te hacen el gran favor de dejarte firmar una hipoteca a cincuenta años. Los mismos que juegan con las vidas de los becarios en Luanda. Otro ejemplo de lo que, a base de ser cotidiano, llega a parecernos normal. Otra historia, que tantas veces repetida, creemos forma parte del orden natural de las cosas, inevitable e inexorable. Si no fuese por un detalle, un detalle que muchos se cuidan muy bien de ocultar: detrás de todas esas historias, contratos, instituciones, cargos, hipotecas y alquileres hay nombres y apellidos. No son anónimos, los conocemos. Tienen los nombres y apellidos de cuarenta y cinco millones de españoles. Están los nombres y apellidos de los hijos de puta, de los que se joden, de los callan y consienten que les den por el culo. Están los nombres y apellidos de todos los que una vez pisaron esta perra España.

. . .

Muy bonito... Y ahora qué?

Pues vosotros no sé; pero a estos chavales de Luanda se lo voy a decir claro. Me parece muy bien que sigáis haciendo esfuerzos ingenuos por mejorar vuestra situación por medio de los cauces políticamente correctos; pero les va a dar igual. Les va a dar igual que empapeléis el ministerio con cartas de protesta; sobre todo si son de esas en las que váis pidiendo por favor, con la cabeza gacha y sin ánimo de molestar, lo que es vuestro por derecho. Les va a dar igual una nota de prensa de la que nadie se va a acordar dentro de dos días. No vais a conseguir nada apelando a sus buenas intenciones, a la justicia o a unas leyes hechas a la medida de vuestros orificios anales. Si de verdad queréis solucionar algo para vosotros y para los que vengan detrás, tenéis que convertir vuestro problema en el problema de los hijos de puta. Cómo? Pues así, a bote pronto, se me ocurre que si vuestro alojamiento no os parece digno... Idos a dormir al salón del embajador! Acampad en la cocina del consul! Llevaos el saco de dormir al dormitorio del consejero!!! Ya veréis como empiezan entereros, les aflora la vena compresiva y lo arreglan todo cagado hostias. Y tranquilos, no creo que la policía de Angola vaya a desalojaros de la Embajada. Uy, y si mandan al ejercito o a la benemérita, mejor, seguro que así saliis en el telediario.

Qué es más fácil de decir que de hacer? A mí me lo váis a contar...

Qué no hay que ser tan radicales? Pues sí, hay que serlo. Radical: perteneciente o relativo a la raiz; en este caso, del problema. Sí, radical, y a mucha honra.

Y por si a alguien le queda la duda: no, no soy tolerante. Hay opiniones que no respeto, actitudes que no consiento y acciones que no tolero. No, tampoco soy, demócrata. Que vaya a votar dos veces cada cuatro años la madre que los pario; a mí me gusta ejercer
más a menudo mi derecho a decidir. Y ya puestos, libre me siento lo justito; desde que me fui de España un poco más.

Ya veis, no estoy de broma. Si de verdad estáis dispuestos a solucionar el problema, dadle con él en los morros a los responsables, dejad de jugar a ser los niños buenos, basta de suplicar por lo que es vuestro. Lo malo de querer jugar según las reglas, de seguir los cauces, de ser políticamente correctos, es que a los hijos de puta se la sudan las reglas, los cauces y sólo son correctos cuando les conviene. Así que, o lleváis el conflicto a vuestro terreno, al personal, al cara, a donde no se puedan esconder detrás del cargo o la institución, o estáis jodidos, porque ellos siempre hacen trampas. Dejad de ser una esdística sobre papeles que deambulan por los despachos, convertiros en personas de carne y hueso, con nombres y apellidos, a las que les de miedo mirar a los ojos.

Lo digo por experiencia. Por la de haber luchado. Por la de haber perdido. Y por la de haber ganado...

lunes, 9 de julio de 2007

Silverstone 2007: Alto y claro

Así se dijeron ayer muchas cosas sobre el asfalto de Silverstone: alto y claro. Los Ferrari han dejado patente que no se van a dar por vencidos, queda mucho campeonato y van a luchar hasta el final. Kimi se encargó de mostrarnos que el doblete de Magny-Course no fue un espejismo. Ya se siente cómodo con el F2007 y los Bridgestone, ha cerrado la boca a los que le daban por derrotado. Por su parte, Massa, tras el error, fallo mecánico o lo que fuese que ocurrió en la salida, hizo una remontada terrorífica: de vigésimo segundo a quinto. No parecía él. Adelantando a diestro y siniestro; por un momento casi llegué a pensar que nos habían engañado a todos y habían vuelto a sentar a Michael en Ferrira número 3. Pero no, era Massa. Por una vez supo pilotar sin estar solo en la pista. Hasta que se topó con Kubica, claro, otro que también les ha tomado la medida a los Bridgestone desde hace un par de carreras y le está sacando los colores a Quick Nick. Sea como fuere, lo de Massa fue una muestra más de que en Ferrari están muy fuertes.

Alto y claro, más que nadie, habló Alonso,
dentro y fuera de la pista. Esta vez, con los números en la mano, no se calló. Entre líneas, con sus declaraciones del sábado después de la clasificación, ya nos decía que la pole de Hamilton era un espejismo para la galería. Después supimos que había pedido por activa y por pasiva al equipo que le dejasen dar esa vuelta de más para quemar combustible que al final le concedieron a Hamilton; 130 milésimas que pudieron valer una victoria... Nunca podemos saber si habiendo estado en la pole, Alonso hubiera ganado la carrera. Que habría tenido más opciones? Seguro; pero Kimi estaba muy fuerte... Lo que sí que tengo claro, es que en ese caso no hubiera sido necesario el cambio de estrategia que adelantó su segunda parada, y hubiera podido guardarse los neumáticos blandos para plantarle cara a Raikkonen en la última parte de la carrera, por no hablar de que el finlandés no hubiese contado con seis giros para volatilizar a segundo por vuelta la ventaja que le sacaba Alonso. Aún así, esto nos confirma lo que ya apuntaron algunos hace una semana, que el doblete de Ferrari en Magny-Course se debió a que los Ferrari no se enfrentaron al McLaren adecuado, ese que andaba dando espectáculo al borde de los puntos gracias a una caja de cambios defectuosa y una estrategia chorras.

En cuanto Hamilton
, poco hizo. La pole se la regaló Kimi saliéndose en última vuelta de la clasificación y él mismo reconoció que el noveno podio en nueve carreras fue cortesía de Massa. Por lo demás, casi se carga a un par de mecánicos en su primer repostaje (en las últimas carreras parece que el mecánico de la piruleta está de adorno) y confesó que su coche no corre tanto cuando no copia la configuración del de Alonso. El chaval, además de tener talento, parece que es honesto.

En cuanto a los demás, Renault confirma que su recuperación va con paso firme. Williams sigue con altibajos a pesar de su clara mejoría respecto al año pasado. Toyota con Ralf y Trully... Ralf y Trully, qué más queréis que os diga? Y si añadimos a la lista a Liuzzi, Speed, Weber, Sutil y cia. , hoy también estoy de acuerdo con Hector Campos: también echo de menos a Alesi, a Berger, a Frentzen, ya puestos, incluso a Irvine y a Katayama.

Resumiendo, la carrera que hizo ayer Alonso fue una revindicación ante su equipo, el cronómetro una patada en los morros de los tomaron ciertas decisiones que puede que le costasen la carrera a McLaren, los dos puntos que le recortó a Hamilton son una lección, un toque de atención en la propia casa del inglés. Y por si a Dennis, Whitmarsh y Haug no les hubiera quedado del todo claro, ya se encargo de decirlo bien alto cuando se bajó del coche:

Parece poco dos puntos los que le he recortado a Hamilton en el campeonato, a pesar de la diferencia que hubo entre nosotros durante y al final de la carrera. Desde Canadá, yo creo que he ido mucho más rápido que él, pero en esa carrera no pude quedar en una buena posición por los problemas del safety car. En Indianápolis yo era el más rápido, pero no podía adelantarle, en Magny-Cours tuve el problema con la caja de cambios en la crono, y aquí ha habido una carrera normal y le he sacado otra vez 30 segundos, por lo tanto, con carreras normales, tarde o temprano se rebajará la diferencia, y eso es lo que tengo que intentar hacer, tener fines de semana sin complicaciones y estar en el podio un peldaño mas arriba que él.

... Alto y claro.

miércoles, 4 de julio de 2007

Horizontes

Todo se detiene. Marco la página con un dedo. Alzo la cabeza. El tren sigue a 160 km/h, pero al otro lado de la ventanilla todo está quieto. El horizonte es lo único que se ve cuando cruzas el puente enorme que une Fyn y Sjælland. La mar plomiza a izquierda y derecha, se encuentra allá, lejos, con el cielo gris de tormentas. Las distancias se rompen en esa línea difusa bajo la que aguarda el mundo, sobre la que el universo contempla.

Qué hacía en aquel tren de vuelta de Århus a København es lo de menos; conformaros con saber que era por culpa de ojos azules y piernas largas, en concreto, un par de cada. Lo importante es aquel horizonte, porque bien podría ser otro que he contemplado tantas veces. Lo he mirado borroso bajo las tormentas de invierno arrastradas por el noroeste. Lo he contemplado resplandeciendo con el azul del verano. Lo imaginado cuando se ocultaba tras las brumas de otoño. Siempre ha estado allí. Los días que paseaba con los pies descalzos sobre la arena humeda. Las noches que me acercaba a acariciar al viento del norte. Me ha visto jugar como un niño, me ha oído gritar, me ha dejado llorar. Ha estado allí mientras me abrazaban y me besaban. Me ha hecho compañia cuando creía que estaba solo. Quieto y callado nos ha acompañado en más charlas y paseos de los que puedo recordar.

Me he pasado media vida con los ojos clavados en ese pedazo de horizonte entre San Pedro y la Providencia. Viendo aparecer y desaparecer en él mercantes y veleros. Muchos creían, incluso uno mismo a veces, que cuando me escapaba al arenal de San Lorenzo era para ver la mar, y a veces lo era; pero siempre, el arrullo de las olas en primavera o la marejada furiosa de otoño me susurraban mensajes, el olor a salitre y vida tiraba de mi alma, el viento del norte, revolviéndome el pelo con sus dedos fríos, arrastraba palabras. Alzaba mis ojos hasta el horizonte. Se quedaban allí suspendidos, dejando pasar los latidos. Qué habría al otro lado? Cuándo?

Ahora ya estoy aquí, al otro lado del horizonte, buscando respuestas a las preguntas que arrastraba ese viento inclemente que, para los que hemos crecido a orillas del Cantábrico, es el más cálido del mundo, el único que queremos sentir en la cara el día que digamos adiós. He encontrado algunas de las respuestas y las he vuelto a dejar ir con el viento. Otras siguen escondidas detrás de la fina línea entre cielo y mar que, inmutable, sigue siendo testigo de mi andar, sigue cantándome. Poco importa que mi vida se acerque mucho a algunas de las que he querido vivir, sigo mirando al horizonte y sintiendo añoranza... De lugares que no he pisado, de personas que no conozco, de vidas que no he vivido.

P.S.- El vecino ha debido volver de vacaciones, porque vuelvo a tener internet en casa :D Esperemos que dure... Que no es por joder, eh, por mí se puede volver a ir de vacaciones cuando quiera; pero sería un detalle por su parte dejar la wi-fi encendida ;)

martes, 3 de julio de 2007

Magny Cours 2007: así, mal vamos...

A veces estas cosas pasan, quiero decir, se te puede romper una caja de cambios en el peor momento. Que bien mirado, no fue el peor, ocurrió durante la clasificación y no durante la carrera, y Alonso aún pudo apañar un par de puntos. El problema es que lo que de por sí no debería pasar de lo anecdótico, las carreras son así y bla bla bla, sumado al rosario de desencuentros y despropósitos que está coleccionando el neno esta temporada, empieza a ser preocupante. En concreto, mi nivel de preocupación asciende a catorce puntos. Lo peor de todo, sin embargo, no fue eso, y no, tampoco lo fue el contundente doblete que se marcaron los de Ferrari. De hecho, hasta me alegré de que Kimi pusiera en su sitio a Massa, y ninguno dio la más mínima opción a Hamilton, que sigue contando con podios sus participaciones en Grandes Premios. Afortunado? Sí. Impresionante? También. Mi preocupación, decía, nace de la chapuza de estrategia que se inventaron en el muro de McLaren para tratar de sacar a Alonso de esa desafortunada décima posición; teniendo en cuenta, además, que tenían que hacerlo con una carga inicial de combustible pensada para hacer tres paradas, o sease, muy poca gasofa. No era tarea fácil, de acuerdo, pero todos lo vimos, y las palabras políticamente correctas de Alonso para defender al equipo no van maquillar lo que fue, repito, una chapuza.

Me alegré cuando vi que Alonso, al contrario que el resto, arrancaba con las gomas blandas. Perfecto, me dije, saben que tiene que parar antes que los coches de delante, y con las blandas puede sacar todo el provecho posible a ese deficit de combustible durante las primeras vueltas y ganar tantas posiciones adelantando en pista. Además, en caso de caer la pronosticada lluvia, contaría con la mejor baza.

Todo fue bien en la salida, que en Magny Course es mucho más traicionera de lo que parece, sobre todo saliendo por el lado sucio. Trully se puso nervioso tratando de defender la posición, se llevó por delante a Heiki y Alonso los esquivó a ambos de milagro. Mientras, Kimi, hacía una declaración de intenciones robándole la segunda plaza a Hamilton.

Después, todo se puso un poco más complicado cuando, tras quitarse de en medio a Rosberg, Alonso topó con Heidfeld. El alemán, deslucido frente a su retornado compañero, Kubica, era mucho más lento que el neno en todas las partes del circuito excepto en el punto clave: en linea recta. El MP4-22 no tenía la punta de velocidad necesaria para darle a Alonso una opción clara de pasar al BMW, por más que lo intentó durante diez vueltas. Así, ya antes de la primera parada las cosas empezaban a tornarse irremediables, y Fernando perdía segundos preciosos vuelta tras vuelta.

Tras la primera tanda de repostajes, que Alonso hizo, como estaba previsto, mucho antes que sus rivales directos y en la misma vuelta que Hamilton que iba a tres paradas, reapacerió en pista con gomas duras y el cuchillo entre los dientes. Se quitó de medio a Fisico y volvio a ponerse a rebufo de Heidfeld, que hubiera salido del repostaje detrás de Alonso si el de Renault hubiera estado estorbando una vuelta más de la cuenta. Ya ha pasado lo peor, pensaba éste que firma, ahora le han cargado lo suficiente para hacer solo otra parada más o menos al tiempo que todos los que tiene que adelantar. Y como para confirmar nuestras esperanzas, Alonso nos regaló otra de esas maniobras mágicas que sólo ciertos elegidos se permiten el lujo de hacer. A falta de velocidad punta, el adelantamiento, el hachazo que le dio a Heidfeld a la entrada de esa chicane que se hace en cuarta a 200 km/h, fue inaudito, imposible; ahí no se podía adelantar hasta que llegó el bicampeón.

Kubica estaba ya también a tiro de piedra y a Alonso no había quien lo parase. Entonces, llegó la hecatombe. Vuelta 37, Hamilton para a repostar de cuerdo a su estrategia a tres paradas mientras a los Ferrari les daba la risa. Vuelta 38, Alonso entra a repostar... Cómo?!! Perdón?!! Me he perdido algo, seguro, vamos. No puede ser. No, de ninguna manera. Saliendo décimo, no se puede ir a una estrategia de tres paradas, es un suicidio!!! A ver que le pasen los videos de Barrio Sésamo al estratega de McLaren y que aprenda a contar... No podía creerme lo que veía. Lo que no sabía en aquel momento es que todo era peor aún. Porque no, la estrategía final para Alonso no era a tres paradas, sino aún más estúpida: dos paradas con una última parte de 32 vueltas. Eso es la mitad de la carrera!!!

Así, después de otra parada temprana, Alonso se encontró en pista otra vez detrás de Fisico y Heidfeld, noooormal. Y esta vez, encima, con un coche cargado hasta los topes y sabiendo que tenía que conservar las gomas durante 32 vueltas. Fin de la carrera. Al principio era difícil, Ron, Martin, Norbert o quien quiera que fuese el listo que echó las cuentas en McLaren, lo hicieron imposible. Tiraron a la basura el carrerón de Alonso. No sirvieron para nada el derroche de talento y manos con el que se iba quitando de delante a sus rivales, adelantándolos en la pista para luego volver a encontrarse detrás de ellos; pero esta vez sin opción alguna de luchar. El piloto que brilló sobre el asfalto francés, el que puso la salsa y la emoción a la carrera, se pasó las 70 vueltas encerrado entre sus enemigos y encadenado por sus aliados. Así, mal vamos...