martes, 12 de agosto de 2008

Hungaroring 2008: ¡Sorpresa!

La que se planteaba como una de las carreras más aburridas de la temporada, la final fue toda una caja de sorpresas. A falta de adelantamientos que, como pudo comprobar Kimi durante dos tercios de la carrera, son poco menos que imposibles en la pista húngara, tuvimos de todo: pinchazos, fogatas, humaredas blancas, pifias, toques y ganador y podium inéditos.

La cosa se animó ya desde la salida. Ante el doblete de McLaren en la clasificación, la respuesta de Massa fue una arrancada perfecta. Saliendo desde la tercera posición se merendó a los dos chicos de Denis en la primera curva y empezó a marcar un ritmo endiablado, con la precisión y consistencia que el brasileño siempre muestra cuando va primero y está a gusto con el coche.

Buena arrancada también para Alonso, y ya era hora de que el R28 hiciera una buena salida esta temporada; una pena que Glock, en su duelo particular con Kubica, le hiciese frenar, porque si no, además de adelantar a Kimi, hubiera dado también buena cuenta de ellos dos.

A partir de aquí la carrera se estabilizó. Massa en cabeza. Hamilton que no podía alcanzarle. Glock, sorprendente con el Toyota mantenía el ritmo del tercero, Kovalainen. Kubica empezaba a sufrir con el BMW que, por algún extraño motivo, nunca tuvo buen ritmo en todo el fin de semana. Alonso apretaba vuelta a vuelta, como siempre sacando lo mejor del R28 y manteniendo a raya a Kimi con soltura y seguridad.

Y llegó la sorpresa: poco antes de su segunda parada, Hamilton se pasa de frenanda por enésima vez en la segunda curva y su neumático delantero izquierdo dice basta, hasta aquí hemos llegado. Pinchazo y paseo renqueante hasta los boxes. Adiós a la posible victoria y tambien a la carrera si no hubierasido por la suerte que parece que siempre le acompaña. No es la primera vez que el chico maravilla destroza un neumático delantero, y como siga empeñadose en usar esos reglajes tan agresivos y en frenar de la manera en que lo hace, no será la última. Pero te preocupes Ron, tu chico tiene suerte. . .

Suerte que le llegó en forma de fumata blanca. Apenas quedaban un puñado de vueltas para el final cuando el Ferrari de Massa revienta en la recta de meta. Ese fue el premio que se llevó Felipe después de una carrera impecable que había dominado con autoridad desde la primera vuelta: motor roto y cero puntos. Un fallo mecánico de lo más inoportuno para los de Maranello, justo cuando volvián a plantar cara a las flechas plateadas tras dos carreras llendo de comparsas.

Así, mientras el Ferrari número 2 y su piloto echaban humo, Kovalainen, a la chita callando (otro que tiene una copia del Manual de Pesca con Caña de Johny Herbert), se hacía con su primera, merecida e inesperada victoria en Fórmula 1. Le seguía Timo Glock, impresionante a los mandos del Toyota durante todo el fin de semana, haciendo su primer podio, también sorprendente, más que merecido y luchando con uñas y dientes. Tercero llegaba Kimi. . .

¿Kimi? ¿Tercero? Espera rebobina que me he perdido algo. . . ¿Kimi no iba detrás de Alonso? Eeeh. . . Pues sí, pero ya no. ¿Cómo lo hizo? ¿Qué as tenían en la manga los de rojo? Deberíamos de haber empezado a olernos algo en la primera parada. Alonso y el finlandés llevaban estrategias idénticas. Kimi aprienta en la vuelta anterior al repostaje, entró a treinta metros del asturiano, pero salió pegado. Ha cargado menos gasofa, fue lo que pensamos todos relamiéndonos. Pero no, no había cargado menos. Justo en la vuelta en que Alonso entra para hacer su segundo repostaje, Kimi se pasa de frenanda en el mismo sitio que Hamilton pinchó y se da una escursión que le cuesta cuatro segundos, suficiente para que Fernando hiciera su segunda parada sin problemas. Kimi, sin Alonso delante, se hace dos vueltas de escándalo, no esperábamos menos de un Ferrari, y entra a boxes sólo una vuelta después que él. La posición de Alonso parececía segura. Hasta que las camaras nos muestran lo imposible: a Raikkonen saliendo de boxes con más de dos segundos de ventaja sobre Alonso. ¡¿Cómo?! ¡¿Cuándo?! Raikkonen rodó dos vueltas muy rápido, vale; pongamos que le recortó entre segundo y medio y dos segundos en cada vuelta. Eso hacen como mucho cuatro segundos, que era la diferencia que llevaba cuando empezó esta historia. Como mucho, debería de haber salido de boxes emparejado con Alonso, dispuesto a batirse en la primera curva; pero no, salió con dos segundo de ventaja. La vuelta con repostaje de Alonso fue en 1 minuto 47 segundos, fueron una buena vuelta y una buena parada. Kimi hizo su vuelta y su repostaje en 1:43 (!!!). No pudo haber rodado cuatro segundos más rápido, imposible; la diferencia estuvo en el tiempo de carga de combustible. ¿Cómo? Eso es lo que nadie entiende. Los dos tubieron que cargar para el mismo número de vueltas y, como las máquinas de repostaje son las mismas para todos los equipos (introducen 12.1 litros por segundo), los tiempos de repostaje debería de haber sido idénticos; pero Ferrari lo hizo en dos segundos menos. . . ¿Qué truco han aprendido los italianos para repostar más rápido? ¿Tiene algo que ver con las cuatro extrañas fogatas que vimos en otros equipos a la hora repostar (quizá queriendo imitar el estilo Ferrari, pero sin éxito)? No lo sé. Y no lo sabe nadie más que los de rojo; pero el caso es que a partir de ese momento Kimi, sin Alonso para estorbarle, empezó a volar. Marcaba una vuelta rápida tras otra, desquitándose de sus problemas en la clasificación y haciendo valer el número 1 que luce en el morro de su Ferrari. Hasta que, a punto de alcanzar a Glock, le avisaron desde el muro que su motor también estaba a punto de irse al carajo, que se lo tomase con calma y asegurase el podium para salvar el fin de semana tras el fiasco de Massa.

Así acabaron las cosas. Kovalainen celebrando su primera victora. Glock sin creerse que estaba en el segundo cajón del podium. Kimi, pescador en río revuelto, haciendo tercero recortó puntos a sus dos rivales diretos. Alonso cuarto e incrédulo, después de otra carrera sobervia y una estrategia decente, esta vez sí, consiguió el premio, acarició el podium que le robaron los de Ferraro con su último y misterioso truco del repostaje relámpago. Quinto llegaba el chico maravilla, suspirando de alivio, y con las gomas otra vez destrozadas después de perseguir a Alonso, sin alcanzarlo, durante veinte vueltas. Y en BMW tendrán que analizar por qué en dos carreras han pasado de pelearse con los grandes a mendigar puntos.


Imágenes: TheF1.com y Autosport.


2 comentarios:

  1. COn lo tarde ke escribo y soy el primero... jolin.
    como Odio la coñita del ingles. si es ke cuando se dice ke todos los tontos tienen suerte.... esti llevase la palma y si nun ye esti el año en ke gana el mundial... ke espero ke nun sea. nun se cuando será. Los ferraris despistaos. si nun el el hielo ye la caipiriña o si no el padrino. pero anda ke llevan un año los de ke ye pa enmarcar y eso ke tan luchando por el titulo aun. Alonso perdido en el medio del peloton, ke mas da ke seas un fiera al volante si el volante nun va a compañao de nada. Diversion y solo diversion ye lo ke encuentra el Nano esti año, bueno y algun fallo ke otru de su equipo, ah bueno y de paso toda la mala suerte ke toca, pues ya se sabe ke si uno tien coña ahi otru ke tien coñazo. ah y bueno la tercera escuderia en discordia, BMW conformistas con el podium de kubica con el lider del mundial y todo eso y ahora a preparar el coche del año ke viene, ke aunque esto ye un deporte se creee ke las metazs de esti año ya fueron superadas y pa nodejar muy alto el panorama pal proximo año pues a preparar el cochecito y llegar mas fuertes... ke seamos sinceros todavia les kedaba una larga caminata hasta llegar a las flechas plateadas....


    Proxima carrera VALENCIA, oh si Oh siiiiiiii y un servidor ke se va pa ya

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  2. Has de fijarte en Valencia si Hamilton, después del pinchazo de Hungría, sigue frenando de la misma manera que os conté en Hockenheim. Pásalo bien, ya me contarás.

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