jueves, 19 de abril de 2007

Y ya va un año

Decía un amigo en Estocolmo, que no había que dejarse engañar, que en los blogs, muchas sólo contaban la parte bonita de sus vidas, viajes, juergas, amigos. Que lo que parecen vidas de ensueño rara vez lo son. Explicaba Brais, que en todos lados cuecen habas, que no había que frustrarse viendo lo bien que parecían pasárselo las demás, ni hacer comparaciones cuando sólo tienes la mitad de los datos, la mitad que te quieren enseñar, porque siempre vas a salir perdiendo; normal.

Con eso en mente, aprovechando que hoy hace un año que vivo en København... Sí sí, 19 de abril, un año ya! O tal vez debiera decir: un año sólo. Aunque parezca contradictorio, tan cierto es el tópico de que ha pasado volando como que, al mismo tiempo, cuando miro hacia atrás, tengo la sensacion de que ha pasado una década. Mi vida en Gijón es casi un recuerdo lejano, otra vida, de hecho.

Pues eso, que ya va un año. Es un buen momento para hacer recuento. Y digo recuento, que no balance, porque aunque Bitácora las sonrisas y las lágrimas las ha repartido la vida como ha querido, hoy quiero dejar constancia de lo que no me ha gustado de este año, de lo que he perdido, de lo que me gustaría cambiar de mi vida en Dinamarca. Hoy quiero aguantar la mirada que me devuelve el espejo.

Lo es triste separarse de los amigos. Un lugar es sólo un lugar. Se lo decía Thufir Hawat a Paul Atreides (si no recuerdo mal) en Dune, de Frank Herbert, por supuesto. Fue lo primero que me faltó cuando llegué aquí, solo, con mi mochila cargada de incógnitas. Ni la familia, ni los amigos, ni la melona estaban ahí cada día para compartir una sonrisa o preguntarte cómo había ido el día. Aún teniendo en cuenta lo afotunados que somos en el s.XXI de tener teléfonos, meiles o este invento de los blogs, nunca es lo mismo. No sólo eso, no sólo es que no cuento con el apoyo diario de las personas que quiero, lo peor es que ya no puedo ofrecerles el mío. Ya no puedo estar ahí para dar un abrazo, escuchar un problema, compartir una comida, ir a tomar una copa casual o reírnos toda una noche de sábado. Todo se vuelve un tanto futil cuando vives para sólo para ti.

Fue mucho más duro de lo que nunca imaginé, abrir la puerta de una casa vacía, cocinar para uno y cenar solo. Tras unas semanas me acostumbré. Supongo que siempre he sabido disfrutar de mi soledad, escribiendo, por ejemplo. Fueron aparececiendo otras personas. Amigos temporales que van y vienen. Algunos estarán para siempre; hay personas con las que sólo necesitas compartir un par de horas para saber que seréis amigos toda la vida, donde quiera que estemos. Pero algún día también se van y vuelves a quedarte rodeado de daneses, que por muy amables, serviciales, sonrientes y encantadas que estén de meterse en tu cama, siguen sin evitar que tras un año no mienta al decir que no tengo ningún amigo danés. Seguirémos haciendo méritos para que eso cambien en los próximos meses...

Qué frustración el idioma, qué agotamiento, el querer expresarte y fallar una y otra vez luchando por encontrar las palabras adecuadas. Qué alivio cuando descubres un día que eres bilingüe, que ya no necesitas pensar en castellano ni hacer un esfuerzo consciente por entender. Qué impotencia de nuevo al descubrir que por mucho que te empeñes, por mucha soltura que llegues a adquirir y desparpajo que recuperes, el inglés nunca será como tu lengua materna, ni la de las personas que te rodean. Dos barreras que no todos están dispuestos a esforzarse por saltar. A veces nos quedamos mirándonos cada uno desde nuestro lado, resignados. Pero este es el menor de los males. Lo que no dicen las palabras, lo gritan las miradas, lo susurra un gesto y aclara un chiste barato.

Otras cosas no son tan sencillas. No es tan sencillo llegar cada día con una sonrisa a un trabajo que en el fondo te la resbala. Ojo, que es un gran trabajo: buen sueldo, buenas vacaciones, gran horario, una jefa impagable, me permite ver mundo y la mayoría de las veces incluso es divertido. Pero al final, falta esa chispa de pasión. Tanto me da que me digan que refine unos perfiles con el método de Rielveld que que diseñe una cámara presurizada. Ciencia mercenaria, vacía, hueca en comparación con el agradecimiento y el respeto con que me pagaban muchas personas por ayudarles a sentirse mejor durante unas horas. Echo de menos la recompensa de verlas aprender y crecer. Añoro las risas, las preguntas cabronas, los retos que me lanzaban mis alumnos empujándome a mejorar cada día. Tengo mono de ver mis pequeñas pizcas de pasión multiplicándose en vuestro esfuerzo y confianza. Necesito volver a ver que mi trabajo contribuye a mejorar la vida de alguien.

Sigo, recordando los dos meses que tuve que vivir con poco más de seiscientos euros (para los dos meses, con los precios de Copenhague); muy recomendable para templar el espíritu.

No creo que me olvide jamás de la melona, allá sola, con un ahujero en el alma y yo incapaz de remediarlo. Vosotros ya no estáis tan cerca (quizá debería decir tan a mano o tan a menudo); pero a ella la he perdido para siempre. Espero que alguien digno la encuentre.

Un año... Y no hay ni una sóla decisión de la que me arrepienta ni me queje. No tengo derecho a ello, todas fueron mías. Pude elegir, ya es más de lo que pueden decir muchas, y elegí, más de lo que se atreven a hacer otras tantas. Hoy puedo decir que estos son mi vida y mis sueños. Hoy puedo mirarme en el espejo y ver la sonrisa en mis labios, la tristeza en mis ojos; la alegría en la mirada, la meláncolía en las palabras. Podéis verlo? Me oís cuando os repito aquel párrafo de
Gottfried von Strassburg?

He llevado a cabo una labor, una grata labor dirigida al mundo y destinada a consolar nobles corazones: aquellos a los que aprecio y al mundo sobre el que descansa el mio propio. No me refiero al mundo común, a ese mundo de los que, según he oído decir, no pueden soportar el dolor y únicamente ansian estar inmersos en la felicidad. Qué Dios se lo permita! Mi historia no está dirigida ni a su mundo ni a su forma de vivir; su vida y la mía son dos mundos aparte. Es a otro mundo al que me dirijo, al mundo que lleva en su corazón una carga de dulce amargura, que se deleita con ello y con el dolor de la nostalgia, que ama la vida y se entristece con la muerte, que ama la muerte y se entristece con la vida. Dejad que tenga mi mundo en ese mundo, que me condene o me salve con él.

Sí? Sabréis entonces que a pesar de todo, o quizás por eso, esta noche también me dormiré sonriendo.

12 comentarios:

  1. Buen post, Ivan, muy reflexivo. Y me hace a mi tambien pensar que cambiaria yo en estos ya mas de 5 años que llevo aqui, mas cerca de los 6 ya....
    No se, me imagino que para mi lo peor es no poder asi de repente ir con mis hermanos a algun sitio, o a comer un dominguito esa paella de mi madre. O pensar que podria estar al sol de Malaga comiendo un espeto de sardinas, mientras aqui pagare 700 pesetas por un dudoso showarma.
    Tu no tienes parienta, y llegado el momento te puedes liar la manta a la cabeza y largarte. Lo mio no es tan facil....
    Oye, a ver si quedamos un dia para el Moose, coño, que llevas aqui un año y nos hemos visto solo una hora, aquella noche de los MTV Awards!!!

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  2. Qué valor, cariño, adentrarte con lo negativo... Y qué bonita la idea del principio (aunque sólo sea de pasada), de que en los egoblogs sólo ponemos lo bonito, o lo que deseamos, y que la lectura enfermiza de blogs puede ser peligrosa por cuanto las comparaciones son odiosas...

    En cuanto al resto, te entiendo perfectamente. Abrirse paso en otra ciudad es siempre difícil, y nunca será lo mismo. Lo que queda atrás queda para siempre y no sólo porque tú te has ido, sino porque poco a poco evolucionás y ya no sos el mismo (punto de no retorno, ¿no?).

    Por Madrid va saliendo el sol, Ana Magnani desapareció de escena, así que puede que mi vida vuelva a ser dulcemente surrealista y de colores. Trabajo mucho, no tengo ni tiempo ni ganas de compu cuando llego por las noches... Y te sigo debiendo un mail... qué desastre, estos funcionarios!!! Va a ser que Forges tenía razón.

    Un beso XXL y feliz aniversario ;)

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  3. Sospecho que este post va a tener muchos comentarios...en fin, que si, que estas lejos pero no tanto y cualquier dia la tortilla se da la vuelta y aterrizas otra vez cerca de los tuyos. Porque las danesas son muy rubias y eso ( doy fe ) pero igual que te liaste la manta a la cabeza para irte siempre la puedes liar para volver y ni aqui ni alli habras perdido nada...en este juego de la vida siempre se gana ( pensar eso ayuda a seguir caminando ;-)

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  4. Pues sí, Under, pero si al final estés aquí es porque de alguna manera te compensa, no? Y si es que no, deberías liarte la manta a la cabeza. Fácil o difícil, no hace falta que me lo expliques, recuerda que me vine para acá dejando a alguien en Asturias.

    Tienes toda la razón, Phi. Puntos de no retorno... Quiera o no, ya no puedo volver. Ya no sería el mismo lugar, ya no lo vería igual. Podrá ser mejor o peor; pero nunca lo mismo. Como un servidor, supongo. Me alegra que el surrealismo te tenga tan ocupada ;)

    Gracias por tan alagüeña predicción, capitán. Espero que se cumpla :D Y también tengo que darle la razón en esa manera tan bonita de resumirlo todo. Sólo le corrijo una cosa: pensar eso no ayuda a caminar, pensar eso ES caminar.

    Un abrazo a los tres.

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  5. cumpleaños feliiiiz...
    Pues claro, fue tu decisión y te está compensando...
    Sigue sonriendo al acostarte.
    Muaaaaaaak!

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  6. UN AÑO...!!!
    Uno de los peores de mi vida...
    Pero con la esperanza puesta en el futuro.
    Un año de ver como la vida a fuerza de golopes te iva convirtiendo en hombre, golpes que yo sentía, a pesar de tu silencio, en mis propias carnes y sigo sintiendo con la desesperación de la impotencia por no poder aliviarlos pero sabiendo a pesar de todo, que a veces son necesarios, para los dos, aunque de distinta forma.
    Es terriblemente doloroso, y me parece que lo seguirá siendo, ver el cuarto vacio sabiendo que lo estará muchos dias, eso si, esperando volver a ver tu ropa tirada por todas partes y ese desorden tan ordenado...
    Las largas charlas y tantas otras cosas...
    Vacios que no se pueden llenar con nada ni con nadie...
    Aunque sea en la distancia, siempre estarás aquí y este será siempre tu "hogar" por muchos otros que construyas aunque sean mejores.
    Doloroso saber que sufres y no poder hacer nada porque tu vida es tuya.
    Pero con esperanza, porque eres fuerte y capaz de superar muchas adversidades y reveses e incluso, desde la distancia, animarnos tu a nosotros cuando debería ser al revés.
    Por eso y por tantas otras cosas sigo sintiendome terriblemente orgullosa de ti. TE QUIERO.

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  7. Para casi todos es duro estar separado de las personas a las que queremos, sólo los valientes lo saben llevar con la misma entereza que tú y sólo los que arriesgan consiguen lo que quieren y no tengo ninguna duda de que con el tiempo (espero que poco)tu serás feliz allí donde y con quien decidas estar. Espero que sea en nuestra querida tierra para tenerte cerca.
    Un beso
    Keli.

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  8. En referencia al tema lo que tiene Under es cojones porque yo no aguanto 5 años en muermoland ni loko!!no se que le debe dar la novia...??...
    volviendo con ivan,los daneses son como los catalanes les cuesta darte una amistad pero cuando te la dan es de verdad,pero no te la van a regalar te la tienes que currar,y es normal que todavía no tengas amigos daneses tiempo al tiempo,a ver si jutta te presenta mas amigos,voy a hablar con ella....!!
    Creo que si vas aprendiendo danes te ayudara a que ellos se habrán te lo digo porque conozco un poco el percal ,si hablas ingles pues serán amables divertidos,pero si hablas su lengua te sentirán mas cerca y eso te ayudara a profundizar.
    Y acabando si de verdad el trabajo no te llena y el tiempo es duro mucho meses y una moza danesita no te tiene agarrado el paquetin.la pregunta seria ivanillo que haces en Denmark??
    un abrazo

    nacho

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  9. Nacho, a veces siento esto mio y a veces no. Pero cada vez mas a menudo vuelvo a España. Antes era cada 4 o 5 meses, ahora cada 2.

    Veremos si al final nos liaremos la manta a la cabeza....

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  10. Señoras, ya lo decía el abuelo: "El que no arriesga no gana." Así que, aquí estamos, arriesgando. Un abrazo, y no me sean ustedes tan dramáticas que me quitan protagonismo. Jeje ;)

    Nacho,ya advertía al principio que en esta entrada sólo iba a hablar de lo "malo". Así que aparte de todo eso, otras cosas habrá que me compensen; he hablado de ellas otras veces. A lo mejor debería ponerlas todas juntas en una misma entrada para que os quedéis más tranquilos, jeje.

    En cuanto al trabajo, supone una mejoría en muchos otros sentidos. Por el clima, bueno, en Dinamarca llueve menos que en Asturias... Las danesas, pues hombre, no creo que haga falta que me enamora como un becerro para estar aquí. Y en cuanto al resto de los indígenas, nu jeg kan godt tale på dansk, så den er ikke der problemer, así que no molestes a Jutta más de lo necesario. Simplemente es algo no me esperaba que fuese a ser tan complicado; pero es lo que hay y ya está. Sedatio et tranquilitas.

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  11. se te hecha demasiado de menos.
    la rata

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