miércoles, 14 de enero de 2009

Cogiendo ritmo


Con tanto viaje, tanta navidad y tanto trabajo, he tenido esto un poco parado. Así que va siendo hora de sacudir un poco la bitácora; pero poco a poco. . . Tampoco es cuestión de estresarse, que acabamos de empezar el año y, como decía mi abuela, las cosas no son como empiezan; aunque empezar haya que empezarlas. Así que, una vez aterrizado en Copenhague y dormido un buen puñado de horas en mi querida y enorme cama, empecé por organizarme la montaña de trabajo que tenemos que terminar para fin de mes.

Ojo, no descuidar la vida social, que por aquí abunda, pero hay que regarla con generosidad o, mejor dicho, darle de comer. Como fue imposible reunirnos antes de navidad, nos guardamos la cenorra para este sábado. Mucha y variada comida, vino en abundancia (aún me quedan unas cuantas botellas en la cocina, gracias) y una docena de individuos entre españoles, húngaros, italianos, danesas, islandeses, yankis y australianas me llenaron la casa de ruidos y conversaciones agradables, risas y sonrisas, calor, aroma a hogar y platos que fregar. Pero ese problema nimio lo resolvimos por la mañana (ejem. . .), después desperdigarnos por la noche danesa y recuperarnos durmiendo la mañana a pierna suelta.

Leer. También han sido días para leer. Mucho. A ratitos u horas enteras una tras otra. Volver a sumergirme en historias que me echaban en cara que las hubiera dejado abandonadas durante semanas. Ya hemos hecho las paces. Vuelven a susurrarme inspiradoras. Vuelvo a tener la cabeza bullendo de ideas. Tantas y tan poco tiempo, como siempre, como tiene que ser, para sacarlas del caos y ordenarlas sobre una hoja en blanco. Poco a poco, ya habrá tiempo. Y si no, ya lo robaré, para variar. De momento algunas irán saliendo por aquí, que me he olvidado de vosotros, ni de mí.

Y entrenar, cómo no, cómo si no. Sin el dolor, sin el sudor, sin el agotamiento se me escapa la cordura entre días vacíos. Sin golpear con todas mis fuerzas, sin defender en un parpadeo, sin aprenderme un poco más cada día, cómo voy a saber que estoy vivo.

Estos días voy saliendo de la hibernación poquito a poco, sin prisa, voy cogiendo ritmo.


Imagen: adaptación de Rhythm, illdesign.

8 comentarios:

  1. Mira tu, como Paca y Tola, je, je, je.
    Un besazo bixo!
    PD: Ah! y como Furaco. je, je, je, je, je, je,. muak, muak, muak, muak.

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  2. Y siguen volando puñales. . . Fiuuuu ;)

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  3. Que non fiuuuu, que nun son puñales, que en mi pueblo y creo que en el tuyo tambien, son "cheiras" ;)

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  4. Oye, sé que no viene a cuento, pero sabes qué he hecho?, leer los primeros posts. Interesante!

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  5. ;)

    También lo hice hace un par de meses. Y volveré a hacerlo. Sí, es ra. . . intesante; aunque supongo que de una forma diferente que para ti. Es casi como si los hubiese escrito otra persona. Y es probabla que sea cierto. . .

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